Hugo Neira analiza comportamiento de Martín Vizcarra
Por: Juan C. Ángeles Moreno
– El presidente Martín Vizcarra fue criticado por ir al Congreso para protestar por la no aprobación de sus proyectos de reformas políticas. ¿Qué opina al respecto?
Estoy asombrado de ese comportamiento. ¿Por qué resulta chocante que el Presidente entre a un Parlamento de esa manera para rezongarlos? Porque en todos los países civilizados, el mandatario o la reina no pueden ir a la cámara de diputados o senadores sin pedir permiso. Las cámaras deciden. Ahí está el respeto (…). El Presidente no puede ir al Congreso, como si fuera un ministerio, para ver si funciona. Esto refleja que no sabe cuáles son las maneras democráticas. Debe entender que el Legislativo no es un poder por debajo de él, sino igual.
–Diversos legisladores dijeron que el Ejecutivo pretende cerrar el Congreso. ¿Cree lo mismo?
Si cierra el Congreso, queda un Comité Permanente que convoca elecciones. ¿Qué seguridad tiene de que va a ganar él u otro, o que regresen los mismos congresistas? Le hicieron creer que si se ponía fuerte y se enfrentaba a Keiko [Fujimori] se volvería popular, fue cierto porque subió a un 70% en las encuestas cuando la metieron presa. Sin embargo, los pueblos son muy inestables, no porque una vez pase, va a ocurrir siempre. El Presidente está asustando a la población. Yo le recomendaría que no haga eso. A las personas les gusta alguien fuerte, pero si se asustan, termina siendo impopular.
–¿Lo hace por no perder popularidad en las encuestas?
Las encuestas son mínimas, cualquiera que se haga, son pequeñas porque solo responden 500 personas en Lima y lo hacen pasar como si fuera todo el país. Me preocupa que los últimos presidentes estén pendientes de la popularidad. El buen presidente y buen estadista es quien hace cosas impopulares por un bien.
–Quieren que el Legislativo apruebe la reforma política. ¿Cuál es su análisis?
La reforma necesita diálogo, tiempo y voces de expertos, en especial psicólogos (risas). No entiendo por qué hay tanto apuro. Se tiene que ver detalladamente porque quedará para el futuro. Me parece que su meta es una pluralidad de pequeños partidos, con lo cual se justificaría un magnopresidencialismo. Y pensar que los politólogos de otros países de América Latina están llegando a la conclusión de que el presidencialismo ha retrasado el desarrollo, puesto que inevitablemente desemboca en un leadership (liderazgo) autoritario. ¿Vamos a repetir los años veinte de [Augusto B.] Leguía como celebración del Bicentenario?
–¿Vizcarra quiere quedarse en el poder?
Pareciera ¿no?, o está trabajando para un magno poder, para alguien más.
–¿Salvador del Solar podría ser su sucesor?
Podría ser. Tengo una buena opinión de Salvador del Solar. Sabe contenerse, pero le pueden dar una maquinaria que lo lleve inevitablemente al autocratismo (…). El sistema te vuelve tirano.
–¿Cree que su salida como columnista de El Comercio fue por presión política? Usted estaba en contra del enfoque de género.
Nunca me hicieron una observación a mi columna. No sé si fue por presión, supongo que podría serlo. Es curioso porque cuando escribía en La República con libertad, hice un artículo donde puse: “con Humala, ni con una pistola en la sien”, la publicaron y luego me dijeron: “Señor Neira, estamos haciendo una reestructuración –igualito que en El Comercio–, vamos a tener que prescindir de sus servicios”. Mis columnas son imprevisibles, pero quieren lo correcto, o sea lo que ellos decidan, pero no me da la gana. Prefiero no escribir.
Publicado en el diario Expreso, 29 de mayo de 2019